Hola, aquí les voy a contrar una de esas historias que a nadie se cuenta. Tengo 25 años, piel algo apiñonada, cabello castaño oscuro, ojos castaños y muy guapa o al menos eso dicen mis amigos, mis medidas son 99, 75, 98 y tengo un par de piernas por las cuales recibo muchos elogios además soy casada desde hace 4 aunque con mi pareja tengo 8 años y es normal que después de tanto tiempo todo empiece a caer en la monotonía y por lo cual aburre incluso el tener sexo por mucho que se quiera a esa persona. Así pues después de mucho hablar decidimos hacer un trío con otro hombre ya que era una fantasía que compartimos. Pasaron un par de meses y mi esposo me comenzó a mostrar fotos de hombres a los cuales había el contactado vía internet y la verdad a todos les puse un pero ya que unos no eran físicamente algo que me gustaran y otros ya pasaban de una edad en la cual me gustan los hombres. Así que sin decirle nada inicie mi propia búsqueda y entre a un sitio similar a este y luego de hablar con varios y descartar a otros por las razones que antes mencioné me tope con alguien que cumplía con todo lo necesario, era guapo de piel clara , cabello castaño y ojos color miel, tenía un par de años más que yo y su cuerpo estaba dentro de mis parámetros. Comenzamos a charlar por msn, le expliqué a detalle lo que mi marido esperaba que pasará y eso le agrado bastante así que quedé de verle para ajustar ciertos detalles, para esto yo no dije nada a mi marido ya que quería sospenderlo. Llegó el día en que nos citamos y luego de que mi esposo se fuera a trabajar me dirigí al lugar del encuentro. Una vez ahí nos encontramos nos saludamos como viejos amigos y entramos a una cafetería a tomar algo. Ahí comenzamos a chalar bien y puse ciertas reglas en claro, podía notar que no dejaba de mirarme por todos lados y en un momento tomé la iniciativa y lo bese a lo cual correspondió y poco a poco entre nuestra plática nos tomamos más confianza con cada beso, hasta que en uno sentí su mano sobre mis piernas y yo hice lo mismo y pude sentir que todo eso le causaba bastante exitación esperamos unos minutos y luego salimos, me pregunto sí llevaba auto a lo cual dije no, así que fuimos al estacionamiento y subimos a su auto ahí nos besamos nuevamente pero con más intensidad podía sentir como comencé a mojarme tan sólo con esos besos, el dejó de besarme y pregunto sí podía tocar mi vagina a lo cual dije sí, desabrocho mi pantalón y lo bajo un poco y metió su mano debajo de mi tanga y dijo “estas mojada” y yo sólo sonreí el besaba mi cuello y bajo hasta mis senos, bajo la blusa que llevaba y chupo mis pezones con una de mis manos busqué su entrepierna y noté que él estaba muy exitado también, sacó su mano de mi y desabrocho su pantalón y luego continuo él con lo se estaba haciendo así yo pude sacar su pene y empecé a estimularle se sentó en su asiento de nuevo y me pidió sexo oral lo cual hice, lanzaba pequeños ruidos cada vez que mi lengua jugaba con su miembro y se estremecia más cuando mis labios jugaban con su glande, me pidió que parara y llevó el auto al último nivel del estacionamiento y estacióno el auto en el rincón más oscuro, no había nadie ni más autos pues era aún temprano, salimos del auto y nos colocamos entre el auto y la pared bajo nuevamente mi pantalón hasta las rodillas y me puso de espaldas y luego sentí como me penetro en un sólo empujón, sentía su pene entrar o salir una y otra vez intentaba no hacer mucho ruido pero eso era muy exitante comenzó a darme más duro y sentía sus testículos golpear mis nalgas con cada penetrada entonces le pedí que fuera más rápido y alcanze un orgasmo como hace mucho no, él lo noto y luego me puso sobre el cofre del auto, quitó por completo mi pantalón y volvió a penetrarme tomo mis piernas y las echo a sus hombros bajo mi blusa y tomo fuerte mis senos me daba duro y entonces sentí cuando se vino, sentí su semen tibio dentro de mi y debo decir que eso me gusta demasiado, él me miro y yo a él y sonreí pero ahora mi sonrisa estaba llena de morbo, me ayudó a ponerme mi ropa y me llevó a mi casa. No fue la única vez que lo vi. Cuando mi marido llegó a casa no le dije nada de lo que pasó porque creí que lo tomaría a mal, pero esa noche el sexo fue muy bueno.