Esta historia me ocurrió en realidad. Yo había ganado un concurso y tenía pasajes con estadía a un país X. Como era para dos personas, decidí llevar a mi novia. Ella es una chica muy excitante con unas tetas increíbles, un culito bien puesto y una concha como ninguna. Con ella ya vamos juntos casi 3 años y medio y estoy orgulloso de haber sido quien le reventó la vagina por primera vez en su vida.
Este concurso lo gané a los casi 3 años y 2 meses de estar con ella y, como los papás de ella son bien cerrados, por ser premio le dejaron venir conmigo y era la primera vez que íbamos a dormir 4 noches juntos y solos en un hotel.
La noche que llegamos, quise tener sexo con ella y por lo tanto me desnudé en la habitación y la empecé a acariciar, pero ella dijo que estaba muy cansada y que dejemos para otro día. Como era un hotel de 5 estrellas y ella se dio cuenta que yo estaba un poco enojado porque no me dejo culearle, me dijo que llene la tina para bañarnos en ella. Yo lo hice y me metí, al poco rato llegó ella sin ropa y con sus grandes tetas bamboleando. Al entrar, la senté frente a mi y la acaricié desde las tetas, hasta la vagina. Al salir de la tina, solo nos fuimos a dormir los dos desnudos. Al poco rato, ella dijo que se sentía incómoda y se puso su short de pijama.
Al día siguiente salimos a un tour, pero eso es cosa aparte, sigamos con la noche. Esa noche, ella dijo que le incomodaba dormir desnuda y se puso su pijama, el short con calzón por debajo y la camiseta sin sostén. Yo, como si me gusta, dormí desnudo. Lo que no les conté, es que yo padezco un poco de insomnio y me sé despertar a media noche y me cuesta dormirme. Esa noche, como siempre, me desperté y no podía volver a dormir, así que decidí probar que tanto dormía mi novia y, como ella estaba dormida boca arriba, le puse una mano sobre el short de pijama en la zona de la vagina y ni se despertó. Al darme cuenta que no se despertaba, metí mi mano un poco hasta llegar a su calzoncito y también la dejé quieta. Aún no se despertaba. Mi pene estaba duro como piedra y yo sentía como el líquido lubricante se me chorreaba. Quise probar más y metí mi mano por debajo del calzón hasta que quedó sobre sus pelos vaginales. Intenté bajar más pero el short era apretado en la cintura y no me dejaba, así que quité mi mano y la metí por un lado de la pierna, por debajo del short y del calzoncito. Fui bajando poco a poco hasta que pude sentir su labio, y como todo era oscuro, me imaginaba su vagina como estaría pero sin poder verla. Mi dedo acarició su labio algunas veces, hasta que decidí masturbarle. Fui llevando mi dedo lentamente hasta su orificio y pude sentir que estaba muy mojado, y ahí me di cuenta que aunque ella duerma, su vagina se moja. Lo metí muy adentro, y luego lo saqué. Repetí esto para masturbarle y sentir sus jugos mientras los míos caían sobre la sábana. Al ver que no despertaba, metí dos dedos y luego tres, hasta que ella se acomodó y se puso de lado en vez de estar boca arriba. En ese momento la dejé y me dormí.
La noche siguiente, igual me desperté a media noche cuando ella dormía pero esta vez la vi acostada de lado con su culo redondo hacia mí. Así que primero me pegué a ella y topé mi verga sobre su culo pero sobre el short de pijama. Al ya excitarme, empezé a bajar su short muy de a poco pero me costaba por lo que ella estaba de lado, pero logré bajarlo hasta casi la rodilla. Luego seguí con el calzoncito y lo bajé hasta el final de las nalgas, y cuando estaba a punto de bajarlo más, ella se levantó como sonámbulo y yo me hice el dormido. Se paró, se alzó otra vez el short y el calzón y se acostó. Esto me enojó un poco, así que no así nada pero era también para que se duerma bien otra vez. Más tarde, ella seguía de lado con el culo hacia mí, entonces metí otra vez mi mano por debajo del calzón y llegué a la vagina. Esta vez la sentí más rica, más estrechita y mojada. La pude tocar por debajo del culo, pues ella estaba de lado y con las piernas un poco dobladas, o sea, la tocaba por atrás como cuando se culea en 4, pero la vagina era estrecha pues ella estaba con las piernas bien cerradas. Esto me gustó más, pues sentía sus labios vaginales salir por abajo de sus nalgas, y otra vez le masturbé hasta que me cansé y me dormí.
La mañana siguiente, ella me dijo que no quería tener sexo porque le dolía la vagina y yo le pregunté que porque sería y dijo que no sabía. Obviamente, yo sabía que era porque le metí mis dedos cuando ella tenía su conchita muy estrecha pero no le dije nada. Esa noche, no pude hacer nada porque me cansé demasiado en el día y dormí de corrido, sin depsertarme a media noche.
La mañana siguiente era el día que se acababa el premio y debíamos volver. Cuando sonó la alarma, ella me dijo que yo me bañara primero. Pero en lugar de eso, yo empecé a acariciar sus tetas y sentir sus pezones muy parados. Luego bajé a su vagina y la sentí mojada. Ella me dijo que traiga un condón y lo hice. Cuando volví a la cama, ella seguía con camiseta, pero noté por debajo de la sábana que su calzón y su short ya no estaban ahí. Ella estaba acostada exactamente igual como la otra noche, de lado y con su culo hacia mí. Yo me puse el condón y me fui pegando a ella, hasta que sentí su vagina húmeda y le penetré. Ella estaba como cansada y no hacia moviemientos, pero yo sí me movía como loco pues le estaba culeando como en posición perrito pero ella totalmente acostada y mi pene dentro de la misma vaginita estrecha que la otra noche masturbé. Mientras le metía mi verga en su mojada vagina desde atrás, le acariciaba los pelos de la misma vagina por adelante, y lo que alcanzaba a tocar de sus labios vaginales con mi pene adentro. Dejé mi mano ahí y sentía como mi verga entraba y salía por esa estrechez de chucha, hasta que terminé y ya el resto fue la arreglada habitual para salir del hotel y volver a casa.
Desde ese día, solo espero el momento para llevarmela a dormir lejos, fuera de mi ciudad, y tener una manera muy divertida y mojada de conciliar mi insomnio. También espero casarme con ella y todas las noches poder masturbar esa vagina tan estrecha y mojada que se divierte mientras su dueña sigue durmiendo…